De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), en el 2022 el número de personas en situación de inseguridad alimentaria aguda aumentó hasta los 258 millones en 58 países.
Desde 2016, las Naciones Unidas declaran el 18 de junio el Día de la Gastronomía Sostenible como una fecha para fomentar hábitos y crear conciencia sobre la protección y preservación de recursos de la tierra.
La malnutrición o la alimentación poco saludable y los hábitos sedentarios influyen directamente en la posibilidad de padecer complicaciones en la salud, pero es importante que el comer se traduzca en un entorno alimentario que mejore la calidad de vida. En este sentido, en la dieta resulta clave tener en cuenta el origen de los ingredientes, la forma de cultivo y el proceso hasta que llega a nuestros platos.
Según investigaciones de la Fundación EAT del Foro Económico Mundial, la producción mundial de alimentos constituye el mayor impulsor de la degradación medioambiental y la transgresión de los límites planetarios. Y es que, el sistema alimentario representa hasta el 30% de las emisiones de gases de efecto invernadero y es el mayor consumidor de agua dulce.
De acuerdo con Maximiliano Acosta, Co-founder y CMO en Goodmeal, aplicación de comida sostenible, actualmente, la apuesta es por una gastronomía sostenible desde diferentes frentes, incluyendo el desperdicio de alimentos. “Al menos un tercio de los alimentos que producimos en el mundo se pierden o se desperdician. Esto sin contar con el efecto negativo que estas situaciones afectan el clima y el medio ambiente donde utilizamos el 34% de la tierra para la producción global de alimentos.”, cuenta Acosta.
Y es que, conforme a los datos de la Organización Internacional WWF, el sector genera residuos y pueden provocar un desperdicio de más de 1.300 millones de toneladas de alimentos, sin contar con la pérdida del 70% de la biodiversidad de ecosistemas terrestres. Un tema desalentador si consideramos el contexto.En el caso colombiano, conforme a lo expuesto por el Banco de Alimentos de Bogotá, más de 15,5 millones de personas sufren por falta de alimentos y más de 560 mil niños y niñas padecen de desnutrición crónica.
Entre las recomendaciones que dan diferentes expertos, aseguran que elegir alimentos de mercados locales incide positivamente en la economía y desarrollo rural; además de consumir alimentos de temporada los cuales respetan las estaciones y condiciones climáticas.
Otras de las acciones que se pueden llevar a cabo en el día a día, se incluye también el planificar compras y menús e interesarse por la sostenibilidad y equidad en los procedimientos. “Todos podemos aportar también desde la cadena alimentaria. Es decir, desde la producción, transformación y distribución de los productos que llegan al consumidor final para que no presente un desperdicio de alimentos que sabemos que es uno de los factores que más afecta al medioambiente.”, afirma Acosta, CMO de GoodMeal.
Es en este contexto, en el cual mejorar la eficiencia en el uso de recursos y promover una agricultura que proteja y fomente los valores culturales, la vida rural, la equidad y la concientización son clave para la seguridad alimentaria de los territorios y la estabilidad medioambiental.
